BRUSELAS, 20 may (NNN-XINHUA) -- La Comisión Europea redujo drásticamente sus proyecciones de crecimiento económico para la Unión Europea (UE) debido al impacto del aumento de los aranceles impuestos por Estados Unidos y a la persistente incertidumbre económica global.
En sus Previsiones Económicas de Primavera de 2025, la Comisión rebajó las estimaciones de crecimiento real del producto interior bruto (PIB) para el bloque de 27 países al 1,1 % en 2025 y al 1,5 % en 2026, frente al 1,5 % y 1,8 % previstos en el informe de otoño de 2024.
"Esta revisión a la baja se debe en gran parte al impacto del aumento de los aranceles y a la mayor incertidumbre causada por los cambios abruptos en la política comercial de Estados Unidos, así como a la imprevisibilidad sobre la configuración final de los aranceles", explicó la Comisión.
Para la zona euro, que abarca a los 20 países que comparten la moneda única, se prevé un crecimiento del 0,9 % en 2025 y del 1,4 % en 2026, también por debajo de las estimaciones anteriores.
La inflación en la eurozona podría alcanzar el objetivo del 2 % establecido por el Banco Central Europeo para mediados de 2025, más temprano de lo esperado. Se espera que la inflación global disminuya del 2,4 % en 2024 al 1,7 % en 2026, con una tendencia similar para toda la UE.
La Comisión atribuyó la desinflación más rápida al efecto amortiguador de las tensiones comerciales, que ejercen una presión alcista menor en comparación con los precios de los alimentos y la demanda a corto plazo.
Sin embargo, las exportaciones de la UE podrían crecer solo un 0,7 % este año, afectadas por el crecimiento global más lento, el descenso del comercio mundial y la pérdida de competitividad dentro del bloque.
El informe advierte que los riesgos siguen inclinándose a la baja. Una mayor fragmentación del comercio mundial podría recortar el crecimiento y reavivar las presiones inflacionarias, mientras que los desastres relacionados con el clima representan una amenaza constante.
"Una escalada de las tensiones comerciales entre la UE y Estados Unidos podría debilitar el PIB y reavivar las presiones inflacionistas. Además, las tensiones comerciales intensificadas entre Estados Unidos y otros socios comerciales clave podrían tener un efecto dominó en la economía europea", señaló el documento.
También se destacó que la presión en las instituciones financieras no bancarias podría extenderse al sector bancario, obstaculizando los flujos de crédito. La persistente inflación en EE.UU., impulsada por choques en el suministro inducidos por los aranceles, podría llevar a la Reserva Federal a endurecer nuevamente su política monetaria, con repercusiones adversas para las condiciones financieras globales y la demanda externa de la UE.
-- NNN-XINHUA